jueves, 4 de abril de 2013

UNA CRÓNICA DEL CURSO "DE LOBOS POR SANABRIA Y LA CULEBRA"


Una grata experiencia. Sinceramente así podríamos denominar al Curso “De lobos por Sanabria y la Culebra” celebrado durante la pasada Semana Santa en el noroeste zamorano. Un total de catorce participantes -procedentes de Teruel, Sevilla, Badajoz, Oviedo, Zamora, Palencia y Burgos- han asistido a este encuentro lobero organizado por Llobu.

Amanecer en la sierra de la Culebra.

El objetivo principal de la actividad ha sido claro desde el principio: la conservación de lobo. Para ello hemos desarrollado un programa completo basado en el conocimiento de la especie; se han analizado diferentes problemáticas de su conservación y se han buscado fórmulas de implicación ciudadana, se han explicado las limitaciones del ecoturismo, se han debatido estrategias de gestión y se han conocido en profundidad numerosos aspectos de la biología de esta especie. Todo ello regado con rigor, con sentido del humor e incluso con la lectura de cuentos e historias sobre el lobo antes de acostarnos.

Coloquio sobre conservación de la especie.
En CTR Remesal  drisfutamos de historias de lobos de la zona en un ambiente acogedor.
¡¡Felices sueños!!

En el campo si bien la lluvia primaveral nos han entorpecido el desarrollo de alguna de las esperas, hemos observado bajo el paraguas y con ayuda de telescopios y prismáticos, algunas de las especies faunísticas de la zona. Hemos visto algunas presas del lobo, como el jabalí, algunos venados ya desprovistos de cuernas o el elegante y  sutil corzo; hemos disfrutado del majestuoso vuelo de una hembra adulta de águila real y  hemos escuchado el canto del primer cuco del año (y por cierto algunos de nosotros no teníamos ni un centavo en los bolsos, lo que sugiere un mal año económico…). La dificultad de observar lobos salvajes en la naturaleza se ha puesto de manifiesto una vez más y la suerte no ha acompañado esta vez. Pero no nos rendimos, seguimos intentándolo; los madrugones, los fríos y la carretera se olvidan cuando el lobo se mete en el ocular del telescopio. El barro existente en los caminos nos ha permitido además conocer y disfrutar de numerosas huellas compatibles con este depredador y con sus presas.

Espera acompañando la salida del sol.

Observando rastros de fauna.

Huellas compatibles con lobo ibérico.

Durante el curso también hemos visitado a Pedro, ganadero sanabrés de ovino, que nos han enseñado su explotación en la Baja Sanabria, donde mantiene una decena de mastines (cada uno de los cuales supone unos gastos anuales de 600 euros) que custodian un rebaño de 1200 ovejas. Hemos conocido su experiencia con el depredador durante varias décadas. La valía de este profesional de la ganadería que ha apostado por la protección de su rebaño frente al lobo, ha encantado a los participantes, que han aprendido la lección: lobos y ganados son compatibles en un mismo territorio. Solo hace falta voluntad.

Custodiados por los mastines escuchamos las explicaciones del ganadero.
Visita del grupo a la nave ganadera de ovino.
Los participantes también pudieron conocer los corralones, estructuras tradicionales para proteger los rebaños del lobo y elaboradas con materiales autóctonos (piedra, madera y urz) así como la vida pastoril.

Visita al Centro de Interpretación de la Vida Pastoril.

Interior de una Corrala.

La visita al Cortello de Lubián, histórica trampa lobera para capturar lobos nos ha sorprendido a todos una vez más. Con ayuda del dibujo y de las explicaciones, hemos podido comprender mejor aún el sistema de trampeo que se utilizó hasta la década de 1950 para capturar a estos animales. En la zona también hemos observado y fotografiado un lobo presuntamente atropellado hace unas semanas.
Dibujando en el "Cortello dos Lobos" en Lubian

Merecido descanso para comer, en el interior de la trampa lobera.

Además de nuestras charlas sobre diferentes temáticas (cultura, ecoturismo, gestión o conservación), como ponente invitado hemos contado en esta ocasión con Jorge Echegaray Fernández, investigador de la Estación Biológica de Doñana/CSIC y sobre todo gran amigo, colega y compañero. Su charla nos dejó a todos muy claros algunos aspectos: la necesidad de que la población ibérica de lobos siga creciendo, la importancia genética de cada lobo (y lo negativo de su pérdida en el conjunto de esta población), así como los efectos de la caza deportiva en la ecología y viabilidad de esta especie.

Jorge Echegaray mostrándonos el interesante mundo de la  genética del lobo ibérico.

Es importante recordar también la ayuda y la buena disposición y el buen ambiente del CTR El Remesal, en Villardeciervos, donde hemos desayunado después de la esperas, hemos comido y también cenado disfrutando de numerosos menús de la gastronomía local.

Impresionante paisaje de la Sierra de la Culebra.

Para terminar, estamos buscando nuevas fechas en el calendario para desarrollar nuevos cursos en esta dirección y con unos objetivos claros: conocer al lobo además de sensibilizar e implicar a los participantes en su conservación. ¡¡Estar atentos a nuestra web!!. Muchas gracias a todos por seguirnos.

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